Hay en estos momentos un gran debate en ciertos círculos sobre las ventajas de la colocación de césped artificial y sus inconvenientes. Algunos no ven más que ventajas en la hierba sintética mientras que otros no dejan de recordar sus inconvenientes, incluso cuando en algunos casos ya se han superado hace muchos años y no existen en los nuevos modelos.
La instalación del césped es ahora más barata ya que existen más profesionales en este sector y pueden ofrecerse precios más competitivos. En cualquier caso, se trata de una inversión que se acaba amortizando en un plazo de tiempo muy corto con lo que se ahorra en mantenimiento del jardín.
Pero al margen de las opiniones y los gustos personales hay una realidad que es innegable, el cambio climático está ahí y el agua va a ser un recurso cada vez más escaso, por lo que hay que potenciar cualquier medida que permita su ahorro.
Un ahorro de agua muy importante
Con el césped artificial se ahorra mucha agua y esto es así incluso teniendo que regar el césped para limpiarlo o refrescarlo ya que la cantidad de agua empleada es sensiblemente inferior a la necesaria para que el suelo se empape y pueda nacer la hierba.
Los estudios son claros y el agua que se gasta en el césped artificial no tiene nada que ver con la cantidad que se consume con el césped natural. Con la ventaja de que siempre se va a ver igual de verde y bonito. Existen incluso máquinas para la limpieza de la hierba artificial que ayudan a gastar menos agua todavía, ya que optimizan cada gota para quitar todo el polvo y darle al campo una bonita apariencia.
Esencial en espacios públicos y lugares comunes de edificios
No solo los jardines privados se están adaptando a planteamientos más ecológicos, también lo están haciendo los espacios públicos cada vez en mayor medida. Ya no llama la atención ver rotondas o espacios entre carriles que en lugar de hierba natural ahora la tienen sintética.
Como tampoco es una novedad que muchas comunidades de vecinos opten por la hierba artificial para su zonas comunes de ocio. Esto permite tener campos verdes y con la mejor apariencia ahorrando millones de litros de agua cada año. Y sin dejar de disponer de un lugar de esparcimiento o de juego para niños.